Mitos en passivhaus
21
Feb

Los falsos mitos sobre las casas pasivas

Cada vez son más las personas que se pasan al lado sostenible de la vida y deciden construir (o reformar) casas pasivas. Una decisión que trae importantes beneficios y en los que no debemos dejarnos influir por los falsos mitos que existen alrededor de este tipo de viviendas. Estos son algunos de ellos y que deberías conocer.

Las casas pasivas son caras

El primer (y más común) mito sobre las viviendas passivhaus. Es cierto que este tipo de casas suelen ser algo más caras que las casas de construcción convencional. Sin embargo, si lo vemos como una inversión a medio-largo plazo al final sale mucho más rentable decantarnos y elegir una casa pasiva sin duda. Y es que esa inversión inicial se podrá recuperar al cabo de unos años gracias a todo lo que se ahorre en climatización y luz. Y es que no debemos olvidar que las casas de tipo pasivo están muy próximas a la autosuficiencia y al ahorro.

Solo es apta para climas fríos

En Alemania, un país frío, es donde surgió la corriente de este tipo de casas. Pero esto no quiere decir que las viviendas passivhaus no cuenten con un aislamiento térmico que evite la pérdida de temperatura tanto invierno como en verano. Es así como la vivienda se mantendrá a una temperatura estable. Además, con la ayuda de un equipamiento de ventilación adecuado que aporte aire saludable a la vivienda el confort está garantizado todos los días del año, por tanto, puede ser apta para todo tipo de climatologías.

Los equipos de climatización son caros

Como hemos mencionado anteriormente, una ventilación correcta y eficiente es vital para que la casa tenga una temperatura estable todo el año. Actualmente existen múltiples opciones a la hora de elegir una ventilación con aire saludable a precios bastante “razonables”. Como se ha dicho en párrafos previos, a corto-medio plazo esa inyección económica se recuperará.

No se puede rehabilitar casas ya construidas al estándar passivhaus

Otro de los mitos que uno no puede creerse ya que no es cierto. Existen empresas que cuentan con personal certificado que les habilita a transformar viviendas de construcción tradicional en viviendas sostenibles y económicamente rentables si cumplen con los criterios de sostenibilidad que marca el Passivhaus Institute. Por lo tanto, la construcción pasiva se puede adaptar tanto a una obra nueva como a la reforma de edificios con muchas décadas a sus espaldas.

Solo se puede aplicar a casas no a pisos

El último mito que desterramos es el que dice que esta filosofía constructiva no se pueda aplicar a bloques de edificios. Todo lo contrario, existen múltiples pisos que han podido ser construidos bajo los estándares passivhaus. En Navarra, por ejemplo, se ha construido todo un bloque de viviendas passivhaus de consumo casi nulo.